Julio. Hagamos Historia.

¿Sabías que en el calendario romano el mes de julio se denominaba Quintilis? Se correspondía al quinto mes y con 36 días de duración. El rey Rómulo lo redujo a 30, y luego el rey Numa de Roma lo llevó a 31 días. Finalmente, el rey Julio César lo estableció en 31 días. Por cierto, en honor a su nombre y a su nacimiento un día 13 de julio, se renombró el mes como “Julius”. Lo que conocemos hoy en día como Julio.

Ahora que ya sabes de dónde viene el nombre ¿sabes ya qué vas a hacer con todo el tiempo libre que te deja el mes de julio? Aquí van una serie de actividades que históricamente se han hecho en el mes de julio, aunque ya le hubiera gustado a los romanos hacer alguna de ellas:

• Bañarse en la playa, en el río, en la piscina. Cualquier sitio es bueno para refrescarse. Incluso una buena maguera.
• Disfrutar del tiempo libre, jugar, ir de campamento, levantarte más tarde, ir a visitar más a los seres queridos, ir al cine de verano, etc.
• Comer helados. De fresa, chocolate, mango o nata. ¡Hay tantos sabores y todos tan ricos!
• Leer. Bajo la sombra de una higuera, tumbado en la colchoneta en la piscina, en la cama antes de dormir, con tu familia los fines de semana… ¿Todavía no sabes qué libro leer? Consulta nuestra selección veraniega aquí.